Las cosas a mi alrededor
El lugar que he elegido es la calle que da a mi casa. Habré pasado mil veces por ahí, pero a la hora de tener que dibujarlo de memoria, solo he podido acordarme de cómo era mi casa, ya que es el lugar al cual me dirijo y no presto mucha atención al resto.
En estas dos fotos se puede observar que cada casa tiene algo distinto a las demás (tejados, puertas, balcones, etc.), pero a la hora de dibujarlas es casi imposible marcar cada una de esas diferencias. Solo se queda la esencia del autor, del arquitecto que las diseño.
¿Por qué has elegido este lugar?
He elegido este lugar ya que me gustaba la idea de poder dibujar algún sitio con cónica, y que mejor lugar que una calle muy larga por la que he pasado miles de veces. Al principio pensaba que iba a ser más fácil de dibujar el lugar de memoria, pero no ha sido el caso.
¿Qué te hace sentir a gusto?
Este lugar me hace sentir a gusto ya que tengo miles de recuerdos allí. La de veces que he jugado por esa calle, que la he recorrido para llegar a casa después de un largo día de instituto o simplemente las veces que me ha tocado sacar al perro y pasar por ahí. Se ha vuelto un lugar donde encuentro tranquilidad.
¿Existe algún elemento molesto?
En los dibujos que he hecho he omitido las alcantarillas y los cuadrados que están en el suelo. Es un elemento que técnicamente es necesario, pero no me gusta como quedan ya que se siente que no van en armonía con las demás estructuras.
¿Crees que te sentirías igual en otro espacio ahora mismo?
No creo poder encontrar otro sitio que me haga sentir igual. Habrá otros lugares donde pueda estar también a gusto, pero no se sentirá lo mismo.
¿Piensas que las condiciones de este espacio influyen sobre sus ocupantes? ¿Cómo?
Yo creo que sí, porque los lugares que te rodean siempre van a influenciarte. Cuando pasas por esta calle no vas a sentir el mismo miedo que por algún sitio donde están las casas abandonadas. El que haya color en las casas, y el suelo y las paredes estén bien cuidadas hace que vayas a sentir comodidad casi siempre.
¿Cambiarias alguna cosa?
No, de momento aun no se ven casas tan anticuadas para la época.
Peter Zumthor “Atmóferas”
Tiene gracia que a lo largo de mi vida siempre se me ha inculcado que no se debe de juzgar un libro por su portada, y tiene su lógica, pero para tener ganas de conocer algo o alguien, primero te debe de atraer. Por eso, el texto Atmósferas de peter Zumthor explica que en la arquitectura se intenta buscar siempre unos espacios acogedores donde la atmófera que la rodea, transmita tranquilidad y sepa conectar con la mayoría de ocupantes.
El autor habla un poco de cada cosa en la que se fija de su entorno y como puede influir en sus estados de ánimos. Me ha hecho gracia, porque cada punto que tocaba me hacia reflexionar a mi sobre otra situación en la que lo estaba sintiendo y ni siquiera me daba cuenta.
Por ejemplo, el sonido: Mientras el autor explicaba los ruidos de su madre trajinando en la cocina con los cacharros cuando él era un niño y que a día de hoy podría seguir escuchando yo pensaba en la calle que he dibujado. Los ruidos siempre han estado ahí y hasta que no comencé a leer este articulo no me había dado ni cuenta. Al igual una de las razones por la que me transmite felicidad esta calle era por los sonidos que transmite. No podía dejar de pensar en que cuando pensaba en este lugar solo escuchaba la voz de niños corriendo o vecinos poniéndose al día después de días sin verse. También me he puesto a pensar en otros sitios distintos que tenían sonidos diferentes. El sonido de un centro comercial, el vecindario loco de mi abuela donde siempre se escucha a los de abajo gritar, o simplemente la salita de estar. Cada uno tenia un sonido distinto, y cada uno me transmitía un sentimiento diferente.
Otro punto que me ha hecho reflexionar ha sido el de los grados de intimidad: ¿cómo es posible que haya lugares que me pueden hacer sentir tan grande y la vez otros tan pequeño? Solemos pensar que eso depende mucho del tamaño del espacio en el que estamos (cuanto más grande el sitio, más pequeños somos nosotros), pero como ha explicado Peter Zumthor con su ejemplo de la villa Rotonda de Palladio eso no tiene nada que ver. Mas de una vez me ha pasado que he hecho el mismo recorrido por dos calles distintas y, aun así, no se han sentido igual de largas. Es como si cada calle o cada casa te hiciera sentir de un tamaño distinto.
El tercer punto que más me gustó fue Entre el sosiego y la seducción: Aquí el autor reflexiona sobre la arquitectura como un arte espacial, y a la vez temporal. Remarca que la arquitectura ha de ser capaz de crear una atmósfera de seducción, y no de conducción, invitando así a las personas a explorar y a descubrir. A su misma vez ha de trasmitir tranquilidad. Por esa razón el arquitecto siempre ha de buscar un gran equilibrio entre sosiego y seducción.
Este texto es bastante instructivo y cada punto que comenta te hace entender la arquitectura desde una perspectiva distinta. La finalidad es hacerte ver que una obra arquitectónica va más allá de un conjunto de materiales bien puestos para que no se caigan y que es importante siempre que tengan una agradable atmósfera que las rodee.